Donna: Avenger of Blood

Donna: Avenger of Blood es una aventura gráfica de corte tradicional, en la que los jugadores podrán controlar a Donna, una mujer que ha sido convertida en vampiro hace relativamente poco. La acción empezará con nuestra protagonista mirando por la ventana de la habitación de su hotel, a pocos minutos del amanecer, cuando un comando de cazadores tira la puerta abajo y le dispara, haciendo que rompa el cristal y se precipite a la calle. Gracias a sus poderes consigue sobrevivir, pero la situación es desesperada.

La mecánica de Donna: Avenger of Blood resultará familiar a cualquiera que haya jugado alguna vez a una aventura de point and click, ya que el juego está desarrollado con el popular motor Adventure Game Studio. En la parte inferior de la interfaz tendremos una lista con las acciones que podremos llevar a cabo, entre las que encontraremos las habituales Mirar, Hablar o Interaccionar; pero también algunas más propias de la condición de nuestra protagonista, como Morder o Golpear. Al fin y al cabo, Donna necesita sangre para subsistir. Y esa será una de nuestras principales preocupaciones durante toda la aventura.

La ambientación de Donna: Avenger of Blood es oscura, opresiva, peligrosa. El juego no está abiertamente inspirado en Vampiro: La Mascarada o Mundo de Tinieblas, pero todo lo que rodea a nuestra protagonista tiene un tinte muy similar al de esta popular ambientación. Algunos de los poderes de Donna, por ejemplo, tienen incluso los mismos nombres que disciplinas muy similares de los libros de Vampiro: La Mascarada. Y la decadencia generalizada, pero sin nombres propios de la ciudad que habitan todos los personajes de la aventura, también consigue transmitir unas sensaciones muy parecidas a las de Mundo de Tinieblas.

Una aventura gráfica vive o muere en la calidad de su historia, sus diálogos y sus personajes. Donna: Avenger of Blood, paradójicamente, vive. Al principio de la aventura sentiremos algo de confusión, ya que el juego no cuenta con un tutorial que explique la importancia de la sangre o los poderes vampíricos. Pero en cuanto la acción toma algo de velocidad, descubrimos una historia apasionante y mucho más profunda de lo que la etiqueta de thriller sobrenatural puede sugerir. Una historia que merece la pena descubrir por uno mismo. A esto, además, hay que añadir unos puzles de calidad, que resultan desafiantes sin ser absurdos, que es un error muy habitual dentro del género.

Donna: Avenger of Blood es una aventura gráfica de point and click sobresaliente que, aunque gustará particularmente a los aficionados del juego de rol Vampiro: La Mascarada o las novelas sobrenaturales, tiene calidad de sobra para convencer a cualquier aficionado del género. Su apartado visual, que de entrada puede resultar algo tosco, se perdona si tenemos en cuenta que el juego ha sido desarrollado íntegramente por una persona, usando fotografías. Un título imprescindible.